Reencuentro

El 17 de Diciembre hizo un año que lo conocí. Fueron los 4 días más increíbles de mi vida y de ahí surgió la primera relación en la que me impliqué al 100%. No podía pasar ese día sin escribirle aunque ahora el contacto fuese nulo pero decidí que mi salud emocional estaba por encima de un recuerdo. Estaba casi segura que él no me escribiría, puede que ni se acordase...

Pero al llegar a casa tenía un email suyo, tampoco es de extrañar, él era el único que se acordaba de los mesarios, me decía que esperaba no hacerme daño pero que era un día importante para él y que quería que yo supiese que aunque no todo fue bueno, él era lo que recordaba. Este mensaje no tuvo en mí el efecto esperado. Yo pensé que el día que me escribiese las brasas arderían de nuevo y toda mi paz se iría a la mierda, pero lo vi tal cual era: un email de alguien que te guarda con cariño, de alguien para quien fuiste importante y que desearía ser solo un amigo más.

Le contesté agradeciéndole que me escribiese y el tiempo que pasamos juntos, porque me enseñó muchísimas cosas queriendo y sin querer. Todo esto dio lugar a un montón de mails más... hasta que el día 23, previendo que el 24 y el 25 no iba a poder ser, lo llamé. Estuvimos hablando 25 minutos, de los cuales no hubo ni dos segundos de seriedad. Como cuando estábamos juntos. Fue todo demasiado normal, demasiado raro, él también lo vio así pero era inútil ponerse serios y hablar de temas que ya estaban suficientemente claros.

Seguimos en contacto, seguimos escribiéndonos mails... algún que otro mensaje a horas intempestivas sí que llegó a confundirme pero todo se aclaró y ahora tengo muy claro lo que él siente, un profundo y enorme cariño que nunca pasará de ahí.

¿Como me siento? Rara y mucho, por un lado todo esto me encanta, volver a entablar esa amistad con él que tanto me llenó en su día es increíblemente importante para mí; pero por otro, al estar sola, lo echo de menos. No sé si a él o es que simplemente, como decía en el post anterior, necesito un polvo y casi con urgencia :P. La mayor parte del tiempo lo llevo muy bien, soy plenamente consciente de lo que hay y habrá (o no habrá) pero momentos como el viernes a las 6 de la mañana, escuchando música en mi coche, después de una buena tajada... es dificil recobrar la cordura (aún así me porté bien y no hice nada eh?)


A todos vosotros... Feliz Año 2009

Porque yo lo valgo...

Llevo siete meses sola, por voluntad propia, sin un triste beso que apuntar en el diario. Como digo es porque he decidido que así sea hasta que no llegue alguien que me convenza de verdad, alguien que me gane poco a poco o de repente, pero que me haga flotar... ya no me vale cualquiera.

Pero hay veces que se echan de menos ciertas cosas, me apetece muchisimo una cita. Como las de las peliculas. Me apetece arreglarme, ponerme tacón y que un chico apuesto esté esperandome con el coche abajo. Me apetece montarme en el coche y que al verme me diga que estoy estupenda, ir a un restaurante y disfrutar de una conversación inteligente mientras tomo vino y algún plato sofisticado. Me apetece que me abra la puerta y me deje pasar, me apetece tener una cita con un caballero apuesto e inteligente...

ya! ya sé que pido demasiado, pero es que esto de tener la autoestima alta tiene estas cosas, yo me creo que me lo merezco y lo echo de menos :) Por supuesto me apetece también acabar en su casa entre sábanas risas y caricias.

Puede que el problema sea ese, que me apetece echar un polvo pero ya no me vale cualquier tipo de polvo, necesito uno interesante, necesito que me cortejen.

Me leo y no me reconozco :P

Simplemente Ella

Cada día soy más grande. Puede que si hubiese dejado el tiempo pasar también hubiese llegado al punto en el que estoy hoy, aunque lo dudo, pero si a alguien le debo todo lo que he crecido estos últimos años es a Ella.

Cuando nuestras vidas se cruzaron yo era cualquier cosa menos decidida y segura de mí misma, como prueba diré que había montado un plan rockambolesco por si el café no iba bien poder escabullirme. Con el tiempo y a base de muchos tés, ella hizo que poco a poco fuese cuestinonándome cosas, principalmente la imagen que tenía de mí misma. Es una chica que hasta que no consigue tocar el fondo del asunto, sea cual sea, no para. Me hizo plantearme que podía estar equivocada en cuanto a muchas cosas que pensaba de mí misma, me hizo pensar que, quizás, yo no era un pato. Supo estar ahí cuando la necesité, ha sabido siempre anteponerme a Ella y estar callada cuando no necesitaba más que silencio. Ha sabido hacerse un hueco en mi vida y reservarme uno de honor en la suya.

Poco a poco voy aprendiendo que si uno no cambia por sí mismo nadie lo puede ayudar pero también tengo claro que todo este cambio no podría haberse producido tan asombrosamente pronto sin Ella. Un enano subido a los hombros de un gigante verá más lejos que el mismo gigante.

Y aunque ahora la giganta está pasando por un bache le tengo que recordar que es enorme, que es mi maestra, que es quien me ha enseñado a ser quien soy, que no sé cuánto tiempo podría mantener esta actitud si ella no me recordase casi a diario que lo valgo, que soy válida y fuerte.

Gracias mi niña, gracias por ser mi pilar, mi empuje, mi punto de inflexión y demostrarme que también eres humana, porque aún así me haces crecer, me haces ver que yo también puedo ayudarte a ti.

Gracias.

Orgullosa de ser quien soy, pese a mi misma

Lo diré una vez, solo una vez, así que más vale que lo apuntéis:

"Si todo lo que he vivido me ha llevado a ser la persona que soy ahora no cambiaría nada de lo que he pasado"

Sí, yo, la que siempre dice que preferiría haber vivido anestesiada, que si el dolor te hace crecer preferiría ser chikitita chikitita.... pero es que últimamente estoy irreconocible, soy una nueva yo.

Medito mucho sobre mí y cada vez consigo hacerlo en términos más positivos. Al menos me acepto tal y como soy, o casi. Me he pasado la vida intentando ser lo que los demás esperan de mí y ahora tengo que aguantar que la gente me diga que no se esperan como soy. Y la verdad es que si lo pienso fríamente yo también echo en falta en mi vida momentos y situaciones que pienso que debería haber vivido y que no lo he hecho.

Ahora me esta dando por ser rebelde, en realidad es por ser floja, creo que estoy jodiendo un poco mi futuro, de repente se me ha metido en las narices que no quiero opositar, ayer hasta hice pellas, novillos o como se dice aquí 'robona'. Pero es que no llevo nada bien la presión.. sí, ya sé, todos dicen lo mismo, que no sea tonta, que al menos lo intente, que es una oportunidad que no puedo dejar pasar.. pero ¿hay vida más allá de las oposiciones?


Espero que sí... o que me entren ganas de estudiar porque si no...

¿Por qué cuando tengo el post optimista en mi cabeza siempre me da por entrar en tu perfil y me cambia la visión? Pero veo lo que he avanzado, sé que ya estás tan lejos que puedo sustituirte sin problemas (o al menos los problemas ya no vienen de mi interior, sino de la poca calidad de los pretendientes...), ya sé que a día de hoy no volvería contigo, aunque fantaseo a diario con no haberlo dejado, ya sé que puedo ser feliz sin ti.

P.S: leyendo a codro he visto un claro ejemplo de lo que intento explicaros, yo nunca tuve mi propia "partredeatrás"Algún día explicaré como ha sido mi infancia y mi adolescencia... desde luego habituales no fueron, pero ¿alguna lo es?